domingo, 28 de agosto de 2011

Dejándolo ir.

Podríamos decir que hoy estoy bien. Quizás no como lo estuve con vos, pero mejor de lo que estaba hace un tiempo atrás. No voy a negar que fui feliz, que me diste todo lo que necesitaba pero también de alguna u otra forma me negaste lo que me faltaba. ¿Cuánto tiempo? ¿Meses, días? Da igual, no tengo noción del tiempo pero si tengo noción de que fue intenso, fueron todas las emociones que podría tener, todas las sensaciones que podría experimentar, los sentidos encendidos, palabras, lugares, momentos... ¿Qué puedo hacer? ¿Odiarte, buscarte, odiarme? El pasado para mí no es pisado, y mucho menos olvidado, pero tampoco me voy a resignar. Al principio duele, duele que no estés, duele verte, duele no verte, duele extrañarte, duele dejar de pensar, duele dejar de sentir; pero el tiempo pasa aunque parezca que no, y me acostumbro, ya no te lloro, ya da lo mismo. Si hagas lo que hagas él no va a volver. ¿En qué fallé? No lo sé, aunque quizás no haya fallas, simplemente no fue porque no fue, y el que no tenga un 'por qué' es lo que más odiamos. ¿Por qué ella y no yo? Si tiene dos piernas, dos brazos, cabeza y alma como yo, ¿Quién lo sabe? ¿Acaso él lo sabe? Nadie sabe, quizás alguien también se pregunte lo mismo para con nosotros. Somos tan complicados, nos gusta lo difícil, lo que nos lastima, tenemos una tendencia a sufrir inevitable. Es fácil decir 'no te preocupes, ya va a llegar algo mejor', pero bien sabemos que lo decimos por cortesía, porque si de verdad pudiéramos olvidar como por arte de magia, todo sería mejor y te aseguro que yo no estaría acá escribiendo esto que nunca vas a leer.
Las cosas que viví con vos quedaron intactas, por más que las haya intentado cambiar 20 veces. ¿Será que en vez de tratar y tratar de olvidar, tengo que aceptar? ¿Cuánto tiempo falta? Creo que ya es hora de soltarte la mano, de dejarte ir de una vez y tratar de borrarme el miedo que me dejaste que hace que siempre cometa los mismos errores. Puede ser que no te importe escuchar todo lo que tengo para decirte, pero a mi sí me importa decirte todo lo que me pasa y eso es lo que verdaderamente importa.

¿Quién dijo que no te vas a ir?

Todo estaba bien, al menos eso parecía. Pero por cuánto tiempo? Horas? Días? Da igual. Tan difícil es construír algo, y tan fácil es desarmarlo... Ese es el karma de las personas inseguras como yo.
Por instinto, por necesidad, por masoquismo o quién sabe por qué pero inevitablemente, en algún momento de la vida nos aferramos a alguien (o a algo). Hoy estamos bien, pudimos contruir algo, construirnos juntos. Para mí va a ser eterno mientras te recuerde, pero para vos quizás no es lo mismo. Quizás vamos a sernos eternos un tiempo, pero quizás caigamos en el olvido y esto muere. Duele, duele acostumbrarse a que faltes, duele extrañar, duele no ser eterna (para vos). Pero lo que más duele no es lo que pasa, sino lo que puede llegar a pasar. Quién dijo que no te vas a ir? Quién dijo que esto va a ser eterno? Quién dijo que esta vez es para siempre? Quién dijo que esta vez no fallamos? Acostumbrarse tanto puede matar, duele más que te arranquen eso que tan bien te hace, que no haberlo tenido nunca. Arrancarte de mí cuesta tanto... será por eso que me aferro cada vez más y más a vos, o mejor dicho a los restos de vos. Cuánto más me aferro, mayor es el miedo que tengo a arrancarte de mi. Y cuántas veces ese miedo mismo a arrancarte de mi llevó a que te pierda (nos pierda) ? Suena contradictorio y un poco irónico, pero vos y yo estamos llenos de contradicciones.

miércoles, 3 de agosto de 2011

El fin.

Cuántas veces intentamos ponerle a algo (lo que sea) un punto final? Cuántas relaciones creemos que llegaron a su fin? Cuántos puntos finales no tan finales ponemos todos los días a tantas cosas?
Le tenemos mucho miedo a los finales, y no voy a venir ahora con esa típica frase tan desgastada "Cada final anuncia un nuevo comienzo". Es cierto, lo sé. Pero de verdad creemos que las cosas a las cuáles les dimos un final, TIENEN final?
La vida, por ejemplo, TIENE final? Eso creemos, pero nadie volvió para contarlo, así que al no saber qué hay después de la vida, preferimos quedarnos con lo más fácil y creer que el final de la vida es la muerte. Pero eso no es lo que en este momento me trajo hasta acá para ponerme a escribir.
Cada uno tiene en su haber miles de amores, amistades, relaciones que creemos que ya terminaron, que ya llegaron a su fin. Pero lamento decirles que (en mi opinión) muy pocas de las cosas que creen que terminaron realmente llegaron a su fin. Si terminó, por qué lo recordás tanto? Por qué escuchás esa canción y te transportás como si fuera mágicamente a ese momento que vivieron? Por qué esa fecha, esa fragancia, esa palabra y hasta esos lugares te hacen recordar tanto? Será por que no terminó?
Nunca pensé que se podían relacionar, pero Fin y Recuerdo están muy unidos. Si una persona murió pero la seguimos recordando, es una manera de hacer que su existencia no tenga fin. Si un músico muere pero su música sigue sonando, creo que su existencia todavía no tiene fin. Tenemos la capacidad de hacer eternas a las personas que tanto quisimos, pero también tenemos la capacidad de hacer eternos los sentimientos que tanto nos queremos arrancar.
Si le pusiste punto final a eso que tanto quisiste y lo seguís recordando, es que todavía no llegó a su fin. Creemos que tenemos la capacidad de terminar lo que se nos antoje, pero en realidad nuestra capacidad es transformarlo en asignatura pendiente o en historia inconclusa, porque en vez de darle un FIN de una vez por todas, lo único que hacemos es hacerlo durar más y más.



PD: Las cosas solamente terminan cuando dejamos de recordarlas.

sábado, 23 de abril de 2011

No pienses que es tarde.

El orgullo mató al sentimiento, y al menos por un momento creíste que eso estaba bien. Creíste que con el tiempo todo iba a pasar, que ibas a olvidar... pero fue imposible. No se si por impulso, por orgullo o por puro placer jugás a lastimar, largás las palabras, pensando que "se las lleva el viento", pero sin saber que una palabra perdura en el tiempo, en la memoria, y que una palabra dicha en el momento justo puede sacar mil sonrisas... o mil lágrimas. Te guiás por lo que ves, la persona parece fuerte porque no llora, pero la persona más débil es la que juega a lastimar, a decir palabras sin pensar, tratando de causar más daño y así defenderse.
Te estás arrepintiendo, lo sé. En la vida, tarde o temprano todo vuelve. Sembrás amor, y siempre vas a cosechar amor, buenas amistades, amores, buenas relaciones. Sembrás odio y al momento te vas a sentir bien, haciendo sentir mal a esa persona que tanto mal (o no) te causó. Pero vas a ver, que te va a quedar esa cuenta pendiente, ese remordimiento, esa culpa que al momento no ves, pero después la sentís, vivís con ella. Sentís una deuda, ganas de remediarlo todo, pero el orgullo puede más, NUNCA vas a pedir perdón. Te entiendo, es muy difícil ser una persona orgullosa, perdés amigos, amores, buenas relaciones... Pero la vida es una rueda, y lo que ayer te lastimó, hoy mismo te puede curar; lo que ayer te causó satisfacción, hoy mismo te puede hacer perderlo todo.
Sin embargo, sabés que sentís lo mismo que el primer día, detrás de todo ese odio, ese orgullo y ese rencor, lo único que pedís a gritos es un poco de amor...

miércoles, 26 de enero de 2011

A flor de piel.

Son esos momentos en los que no sé lo que quiero, o bien, lo sé perfectamente pero odio admitirlo. ¿A quién vamos a engañar? Todos sabemos que detrás de cada sonrisa, de cada mirada se esconden miles de palabras que se esconden pero al mismo tiempo lo único que necesitan es salir.
Será que lo único que quiero es una sonrisa más, un abrazo del talle justo para mi cuerpo, de esos abrazos tuyos tan únicos que me hacen sentir más pequeña de lo que soy. Será que aunque me cueste admitirlo estoy pensando en vos más de lo debido, será que cada vez que te veo se me paraliza el cuerpo y quiero salir corriendo.
No malintepretes mis sonrisas, soy medio estúpida y sonrío más de lo debido, pero sabés que cada sonrisa que me robás te está demostrando lo que siento. Ya pasó un mes que para mi pareciera que fue hace un día, sin embargo puedo respirar tu perfume como si te tuviera acá al lado mío, puedo escuchar tu risa como si estuviéramos riéndonos juntos, puedo verte tan perfecto como si en este momento me tuvieras de la mano y me dijeras ¿vamos?.
Te quería enamorar y me salió mal, salio todo al revés. Me siento diferente, siento como que el tiempo está en cámara lenta pero que los segundos se me escapan de las manos, que nunca es suficiente con vos.
Algún dia nos vamos a poder entender, te voy a poder mirar a los ojos sin ponerme nerviosa y sin esquivarte porque se lo que se viene, y es que inevitablemente me podés! Con tus 25mil defectos y tus otras tantas cosas lindas que tenés, pero para mi sos irresistible (por llamarlo de algún modo) y no me preguntes por qué, porque ni yo lo sé.

Sueños.

Lo imagino, hasta siento que lo toco, que puedo sentirlo. Tan perfecto es que parece real, te siento de verdad, es por eso que me cuesta despertar... Son horas, tal vez minutos pero parecen horas, da igual, horas interminables hasta que yo lo puedo alcanzar en mis sueños. De tanto pensarte, creo que estoy idealizándote, no es que no me guste pensar en vos  (me enloquece, claro) es que necesito dormir más horas, imaginar menos... Que mis sueños sean más cortos y hacer mis realidades mas largas. Esta noche fue diferente, en esos intentos de no pensar en vos para conseguir mi sueño y dejar de desvelarme cada segundo más y más, pensé : ¿Qué significa esto? ¿Qué significa lo que imagino, lo que pienso...? ; fue estúpido ponerme a pensar en eso, creo que todas las personas que tienen alguien que les quita el sueño es porque están enamorados o una opción mas difícil de aceptar: imaginan su realidad perfecta, lo que les gustaría hacer y no se animan, sueñan despiertos. De tanto pensar y estar a oscuras en la cama e imaginar ¿como sería?, ¿qué pasaría?, ¿qué te diría si...?  Hacer algo que muchos no hacen es de valiente, pero te juro que me encantaría dejar de imaginarte e ir a buscarte, a invitarte a mi realidad, a jugármela. Me encantaría que no seas ni mi imaginación ni mucho menos mi sueño de la realidad perfecta, me encantaría que fueras mi realidad, mi día a día.
Es más fácil quedarse acostado imaginando que podríamos hacer o lograr, que levantarse y conseguir de verdad, de una buena vez lo que queremos. Soy cobarde (muy).


Casualidades.

Todos los días están repletos de esas pequeñas acciones, esos minúsculos detalles que nos gustan llamar "casualidades". Encuentros sorprendentes, palabras justas, cosas que a un día común lo hacen un buen día, por ejemplo: las sonrisas. Una sonrisa brillante que nos dedican (o dedicamos) y cambia en gran parte nuestro día. Y más si esa sonrisa es de esa persona que tanto nos interesa, nos deja helados porque claramente no la esperamos. No sé a lo que apunto, pero hoy mi día común se transformó en un día hermoso con pequeñitos detalles, una sonrisa, una palabra justa, un cambio en mi actitud. Esperamos con ansiedad un momento que creemos que va a ser el único, lo esperamos tanto que nos vemos frustrados al sentir que nada salió como lo planeábamos, sino que todo lo contrario. Pero en cambio, cuando nuestro día parece común e igual a todos los anteriores, aparece algo que nos descoloca, una "casualidad" que hace que nuestro día se distinga de todos y sea aún más perfectos, más allá de todos los momentos malos. Ver a una persona que extrañamos, ver una sonrisa que necesitábamos, escuchar esa palabra que nos faltaba, son pequeños detalles que cambian nuestro humor, nos alegran, nos contagian sus sonrisas dibujándolas en nuestras bocas. Ese día que estaba "destinado" a ser igual a los otros, "casualmente" se convierte en uno hermoso.
¿Por qué resalto las palabras "destino" y "casualidad"? Porque no creo en ninguna. En el destino en parte sí, porque dicen que el destino está escrito, no? Pero el destino está en nuestras manos, cualquier actitud nuestra puede cambiarlo, en cualquier momento y en cualquier lugar. Hoy mi destino cambió "casualmente", aunque nada es casualidad en la vida. Damos mil vueltas, pero el "destino" (y nuestras actitudes)  solito va moviendo todas las fichas del juego y nos va juntando, y nos encuentra. Lo demás lo hacemos nosotros, sabías?


PD: Suerte que me animé.

El sexto sentido (Amor, Amour, Amore, Love).

Que grata sorpresa verte de nuevo, ¿no? Cuando menos te espero, aparecés vos. Rompés mis esquemas, desordenás mi mundo, desorbitás mi sentido, enloquecés mi cabeza... Pero en el medio de toda esa locura estás permanentemente encendiendo mi sexto sentido: El sentido "Amor". No sé si te amo, si te quiero o qué es lo que pasa, pero creo que para sentir amor no se necesita calificar al sentimiento, solo sentir que te tengo.
Vos sos la única persona que hace que mis sentidos estallen, se enloquezcan, se descontrolen, se desordenen... Vos encendés mi sentido "Amor", haciendo que mi vista, mi olfato, mi tacto, mi gusto y mi audición se mezclen entre sí hasta volverse uno. Cuando te veo, a metros de distancia puedo distinguirte y sentirte a un centímetro, te reconozco entre cien y te siento entre mil, es ahí donde mis ojos (sentido vista) me indican que estás ahí, siempre ahí.
Escuchar tu voz produce casi el mismo efecto, inconfundible y única, tu voz me hace reconocerte y sentirte cerca (sentido audición). Cuando por fin podemos estar a centímetros de distancia, cuando tu sonrisa parece brillar como nunca, puedo sentir tu perfume que parece inagotable, ese perfume que me envuelve y hace descontrolar todos mis sentidos (sentido olfato). El sentido "Amor" hace que la sensibilidad esté a flor de piel, la química se vuelve única y es por eso que al simple roce de tus manos con mi cintura, mi piel se eriza y es ahí donde se descontrolan mis sentidos nuevamente (con el sentido del tacto). El último (pero no menos importante) sentido que actúa, es el sentido del gusto, cuando puedo probar el sabor único de tus besos, que terminan por enloquecer la poca cordura que queda en mis sentidos.
Pero cuando estás tan lejano que no puedo siquiera respirarte y actúan solamente el sentido "vista" y el sentido "audición", mis sentidos también se descontrolan, y el sentido "Amor" actúa nuevamente, aunque no logra hacer estallar todos mis sentidos. Mis piernas tiemblan, mis pensamientos se mezclan, mis sentimientos se desorbitan, y vos (como siempre) volviste a enloquecerme.
Más que "Amor", yo creo que mi sexto sentido tiene nombre y apellido... el tuyo.

De novela.

Hombres y mujeres pensamos muy distinto. Somos como lo opuesto, o complementarios quizás. Las mujeres somos más ¿enamoradizas? ¿Románticas?. En fin, el romanticismo cada dia está mas desaparecido, al igual que las canciones románticas, los príncipes azules, y otras tantas cosas... Pero chicas, ¿quién de nosotras nunca se imaginó su historia de amor perfecta, con su chico perfecto (que tiene millones de defectos, pero ¡no importa!, para nosotras es perfecto)? Esa historia de amor, de novela/película, en la que los dos pueden vivir su amor en plenitud, sin ninguna complicación, donde no hay que remar tanto, (es más, hasta en una historia de amor perfecta, ellos remarían por conquistarnos a nosotras), donde no falta el "te quiero/te amo" en el momento indicado y en el lugar soñado, donde está ese beso romántico con la canción mas hermosa de fondo... Son infinitas las opciones románticas para elegir, pero la realidad es que en el aquí y ahora, en el mundo "real", difícilmente puede pasar eso... El mentiroso, mujeriego, pirata, seduce con sus palabras (esas que conocemos como "chamuyos"), difícilmente hay beso tierno en lugar romántico con canción de fondo, difícilmente hay "te quiero/te amo" verdaderamente sentido... Es que es difícil que nuestra realidad sea de sueño, de novela... En la novela hay libreto y escenografía, en la vida real hay impulsos y casualidades (aunque en este último tiempo me estoy dando cuenta que esas casualidades ¡no existen!). Hacemos todo por evitarlo cuando sabemos lo mal que nos hace, y así y todo, el destino/casualidad nos lleva a él. Pero por más que sabemos lo mal que nos hace, ¿quién de nosotras me va a negar que nos encanta verlo, que nos puede, y que nos roba unas sonrisas que nos dejan idiotas?
En la novela, el galán rescata a la chica cuando está en peligro, se enamora de ella apenas la ve, dejaría cualquier cosa por ella, hace un sinfín de méritos románticos por ella, ¿y en la realidad? Es difícil, pero no imposible... Todos tarde o temprano vivimos esa historia de amor que parece "de novela", pero es pura realidad. Eso que nos gusta llamar "Gran amor", "Amor de la vida"...  Y tarde o temprano, si estamos destinados, podemos dar mil vueltas, estar con mil personas, pero algo nos hace dar cuenta que es esa nuestra historia, porque hay una persona con la que la química está a flor de piel, una persona con la que sentís con un simple beso cosas que no sentís con nadie, una persona que "te puede"...  Nuestra historia de realidad siempre va a tener un defecto, nunca va a ser tal cual la soñamos, pero eso es lo lindo, descubrir la historia sin tenes un libreto ni una escenografía, ser espontáneos, vivir con la intriga de qué va a pasar, esperar que te llame, besarlo sin apuros, son pequeñas cosas que pueden hacer una gran historia, aunque no haya títulos entre ustedes (novios, esposos, lo que sea). El amor no es perfecto, pero no por eso nuestra historia no puede ser perfecta.

Re-sentimiento.

No me acuerdo en donde escuché que el resentimiento es eso, re-sentimiento. Y es muy cierto eso, no? Aunque lo neguemos y pongamos nuestra mejor cara, intentando disimular, todos somos un poquito resentidos. Siempre hay algun resentimiento que nos hace re-sentir, en fin, el resentimiento vendría a ser como esa especie de cascarita que nos queda cuando nos lastimamos, vemos la herida curada, pero vemos la cicatriz. Y es lógico, cuando dejamos a alguien, cuando somos dejados, cuando nos arrepentimos, cuando lastimamos y hasta cuando nos lastiman quedamos resentidos. Una relación se rompe, y ahí viene el resentimiento, el reproche. La deuda, eso que faltó decir, ese "te quiero" que no dijimos, las palbaras atragantadas... Después nos arrepentimos y es lógico, pero pareciera que fuera algo malo decir que una persona es resentida, auqneu en el fondo, todos estamos resentidos por algo. Y con ese resentimiento, lo único que hacemos es potenciar ese re-sentimiento (amoroso, de amistad, o lo que sea).

El príncipe verde.

¿Por qué verde y no azul? Ya estamos hartas de buscar y buscar la perfección del príncipe azul y no la encontramos por ningún lado. SIEMPRE, por más cercano a la perfección que sea nuestro príncipe (sea del color que sea) tiene algún defecto, o algo que lo distingue.
Como primera medida, tendría que tener algún atractivo físico que lo haga especial, ya sea una sonrisa perfecta, unos ojos bien brillantes, linda boca, lindo cuerpo, en fin, como dicen que "lo primero entra por los ojos" tiene que tener ALGO que lo haga atractivo (aunque sea solamente ante nuestros ojos). Pero ojo! Tampoco tan hermoso porque aburre después (Y las queridas rapiditas los empiezan a codiciar).
Segundo y un poquito más difícil: le empezamos a hablar y es un divino total (al principio, of course)! Hay algo en su personalidad que lo hace más lindo si es posible, es el deportista, el tierno, sea cual sea ese rasgo en su personalidad. Pero inevitablemente, nos empieza a atraer más y más. Todo indica que es el Príncipe Azul! Pero pasemos al tercer paso...
Por último, esa supuesta perfección de nuestro principito va a empezar a desgastarse cuando muestra algún rasgo característico masculino.
Ejemplo más común: Todo marcha perfecto, se tiran flojas indirectas, se vieron un par de veces, ¡Hasta se besaron! (Y nos pueden sus besos eh! ) PERO no quiere nada, están muy bien como están, no hace falta formalizar nada, etc, etc, etc.
El mejor ejemplo (solo al principio!):  Después de muchas idas y vueltas, encontramos al "indicado". Relación formal (o no tanto) PERO... es un celoso/nos cambió por los amigos/nos metió los cuernos/ es un pirata incurable... Otro ejemplo para descartar.
Otro ejemplo y no tan común: Es tan pero tan tan bueno, te quiere mucho... Vos no esperás más ¡Es el correcto! ERROR! Te quiere muchísimo... Como amiga. O bien, tiene novia.
Último ejemplo y no tan común: Al principio, un dulce. Lo conocés más: es un forro.

Conclusión: Príncipe Azul, ¿DONDE CARAJO TE METISTE? Si a todo esto le sumamos que a nosotras las mujeres (aunque lo neguemos) nada nos alcanza, definitivamente creo que podemos pasar muchísimo tiempo buscandolo y difícilmente lo vamos a encontrar. Pero no todo tiene que ser malo, no existe el azul pero definitivamente cada una (a su manera) tiene su príncipe sea del color que sea. Y definitivamente, nosotras NO SOMOS PERFECTAS! Ellos tampoco, claro.

La pura verdad (femenina).

Empieza porque nos gusta ese chico, nos arreglamos y las verdades de las mujeres las conocemos todas. Nos maquillamos y no hay mujer que no abra la boca para maquillarse. No hay chica que no se emocione con una película de amor (The notebook, Titanic, entre otras), no hay chica que no quiera vivir un amor perfecto y de novela. Todas morimos por saber que piensan exactamente ellos de nosotras, ¿Quién no se metería en su mente para saber que piensa?.Que egoístas somos, nos gusta un chico y le hacemos la vida imposible a nuestras amigas, le hablamos tanto que aunque no lo conozca sabe toda su vida, cuando lo vemos y estamos con ella primero le contamos 80 veces que esta ahí re lindo, lo fichas, le preguntas ¿Qué hace? ¿Con quien esta? ¿Cómo que viene para acá? ¿Quién es la trola que le habla?. Pasas una ves para que te vea, y si no te ficha pasas unas dos mil mas aproximadamente. Si te llama, te manda un msj le contas a todas ¡Nooooo chicas no saben quien me mando un msj! ¡chicas chicas chicas me mando, me mando un msj!. Cada vez que lo ves tu corazón late a mil y si tuvieras un espejo adelante verías tu sonrisa de pelotuda que le pones, o tu otra cara de pelotuda, la que quiere disimular haciéndose la seria pero le ficho cada movimiento que hizo. ¿Pelearse con ellos puede ser peor? Primero que nada, nuestro lenguaje femenino de que estamos peliadas, no lo entienden un : Mira vos, que bueno, ah, ok, estoy ocupada, es un “NO TE DAS CUENTA PELOTUDO QUE ME QUIERO HACER LA ENOJADA PARA VER QUE CARAJO ME DECÍS?” “decime dale: te pasa algo”? "No, nada. (Entiéndase por "VOS ME PASÁS, VOS Y TODAS LAS PELOTUDECES QUE HACÉS Y ASI Y TODO ME ENCANTÁS!").
LA TÍPICA: Apenas te conectas, te fijas si esta, por supuesto. Le dedicas Nicks, subnicks, Cada cosa que el pueda leer en Facebook , también se lo dedicas.Lloramos, nos peliamos, le hablamos mil horas a las chicas, te aconseja todo el mundo, pero no importa, para vos no hay ninguno como él! Salís con el, después de elegir 20 veces lo que te pusiste y si te queda bien, después de arreglarte dos horas pensas mil veces lo que le vas a decir, y cuando volves a tu casa te sentís una pelotuda de las boludeces que le dijiste y en menos de un segundo se te ocurre una respuesta perfecta para cada pregunta y pensas : ¿Por qué no dije eso? (Te queres matar, pero bueno todo salio bien dentro de todo).Nos manda mensajes, ellos tardan tres horas en contestar, nosotras un segundo, y en esas tres horas, miramos la hora, y miramos un promedio de 50 veces el fondo de pantalla del celular. Nunca queremos decir “te quiero”, “te amo”, “te extraño” primero, pero cuando lo hacemos un “Yo también” nos conforma (y al mismo tiempo nos queremos matar).Siempre haces una boludes enfrente de el. Se te cierra el msn, se te corta la luz, no llega lo que le decís, siempre pasa.Podes hacer todo para olvidarlo, (muchas boludeces especialmente), salir con tus amigas, estar con nuevos flacos (que estan mil veces más buenos), tomar hasta no acordarte de nada, pero al otro día, te acordas de el, y mas que nunca.Es ley: Siempre le vamos a encontrar un defecto a su actual novia, se va a comer una de putiadas por nuestra parte, y tus amigas obviamente te tienen que decir que vos sos mas linda y que si es una trola y que ellas tampoco entienden que hace con el.Odiamos a sus amigas mujeres.
Pero... ¡Esta cambiando, como no lo vamos a perdonar! Claro, somos tan pelotudas y VEMOS que a todas les dice las mismas giladas que a nosotras, pero (repito) somos tan pelotudas que nos creemos todo lo que nos dice (Hasta un "vos sos la única, quiero estar con vos"). Les contamos toda la historia a nuestras amigas, nos aconsejan, porque ellas si saben que es lo mejor (en la mayoría de los casos) y como siempre, no le hacemos caso.A pesar que es un idiota, que tiene mil defectos (es hermoso) y se manda cagadas, lo vamos a seguir perdonando, porque es tan lindo.. Y nos puede.

Restos de ayer.

Un día cualquiera es uno de esos que parece que va a ser igual a todos los demás, pero siempre hay algo que lo hace "especial". Aca estoy yo, en mi sábado cualquiera, tildada, mordiéndome el labio inferior mientras miro fijamente a cualquier parte por la ventana, colgada, con mi música y mi pijama... Son esos momentos en los que quiero dejar que me invada la música y no pensar en nada ni en nadie (que no seas vos).
Minutos que transcurren con una lentitud desesperante, como si buscaran torturarme... ¿Por qué será que cuando queremos que el tiempo pase más rápido, parece detenerse y ser eterno? Sin embargo, hay momentos que deberían ser eternos (esos son los momentos en los que el tiempo vuela, el momento se escapa).
Y acá estamos, en esta primavera que no huele a primavera, dándome cuenta de que una no comprende las cosas, hasta que nos pasan. Yo nunca entendí a los melancólicos, ¿Con qué necesidad lloran y se cuestionan por momentos que ya pasaron, ya murieron? Y ahora, yo estoy atada a la melancolía, si pudiera volvería a vivir tantos momentos, una y mil veces, hasta cansarme.
Me enferma saber que todo lo bueno poco, muy poco. Los buenos momentos, las buenas compañías, se van tan rápido como llegan.

Si no es con vos, no es con nadie.

Un poco irresponsable de mi parte no saber que una mirada nos llevó a una palabra, una palabra a una sonrisa, una sonrisa a un sentimiento (mío) y un sentimiento a un vacío. Otra vez lo mismo, otra vez canción es igual a suspiro, suspiro igual a sentimiento. ¿Por qué VOS? ¿Por qué NO vos? Si no es una locura, no es amor. Si no es con vos, no es con nadie. Y esa obsesiva forma de pensar tan mía. Y ahora lo único que me importa es respirarte, tenerte. Estamos tan próximos que casi podemos entendernos, pero a la vez tan lejanos que ni siquiera nos escuchamos. ¿Cuántas veces puede pasar? Aun así tratando de evitarlo con cuerpo y alma, pasa.
Lo mas difícil de ver es lo que tenemos enfrente nuestro, te tuve ahí, perdí el tiempo, hasta que empezaste a sacarme el sueño, a hacer que te imagine, mi realidad perfecta...
A veces un minuto es mucho, las horas son larguísimas si, y los meses pasan como siglos, un año es mucho, pero la verdad de todo es que la vida es corta, los años no son nada, asi que como nada nos alcanza prefiero que me alcances (aún si es imposible).

Inevitable.

Evitándote, lo único que consigo es llegar a vos, una y otra vez, siempre vos. Y pienso, ¿Si no llego? Mejor dejo que todo pase y no hago nada, si hacer o dejar ser da igual. Todo tiene su tiempo ¿sabés? pero vos estás muy relajado... Que masoquista es mencionar tu nombre, y aunque no lo escuche llega a doler peor. Una parte de mi se aleja cada segundo mas de vos, y la otra sale corriendo a buscarte.  ¿Será que lo mejor que puedo hacer es dejar que todo pase, o mejor dicho NO PASE?

¿Cómo hacemos?

¿Como hacemos para creer en lo que nos dice esa persona que tanto nos importa? ¿Como hacemos para saber si lo que dijo fue verdad, o solo lo dijo por compromiso?  ¿Como hacemos para darnos cuenta si lo que dijo, lo dijo porque realmente lo sentia o solo porque buscaba algo mas?  ¿Como hacemos para confiar en ellos, si anteriormente sufrimos Por AMOR? ¿Como hacemos para creerles cuando nos dicen con toda la dulzura del mundo: "me encanta estar con vos"? ¿Como hacemos para saber cuales son sus verdaderas intenciones? ¿Como hacemos para saber si buscan algo serio o si solo qieren qe seas una mas en su lista? Muchas veces nos dicen: "Si te gusta, dale para adelante." ¿Y si le damos para adelante y nos damos contra la pared ? ¿Si Descubrimos que todo lo que nos dijo era mentira? Entonces es ahí cuando pensamos que todos son iguales, es ahi cuando nos damos cuenta de que el principe azul NO EXISTE, pero muchas veces lo pensamos porque somos resentidas, porque no nos damos la oportunidad de creer en el amor, porque pensamos qe si nos hicieron sufrir una vez, lo pueden hacer quinientas veces mas. Entonces es asi como nos damos por vencidas y decimos BASTA! No me enamoro mas! y es en ese preciso momento que vuelven a aparecer y la historia se repite una y otra vez , hasta qe tenemos la suerte de encontrar la persona la cual nos ama de verdad (o no).

Complicados.

Te juro que no te entiendo. Y es obvio que vos no me entendes a mi. ¿Por que es tan difícil poder decirlo todo, poder ser claros, poder decir lo que queremos y lo que pensamos sin vueltas? Tan difícil es decir las cosas? Y si, es difícil. MUY difícil.
De tan simple que es todo, se hace complicado. Pasa el tiempo y seguimos sin entendernos, aunque bien sabemos que es lo que pensamos. Entonces, ¿Por que tan complicados? Damos mil vueltas, giramos en lo mismo, sentimos, decimos, odiamos... Y seguimos sin entendernos.
Y con palabras sueltitas, frases sin sentido, ideas sin por qués fui formando algo y de algo que formé sigo sin entenderte y creo que nunca te voy a entender porque ni vos me entendes a mi ni yo a vos asi que enloquecí, es que vos me enloqueces, y bueno eso es todo tal vez.


PD: Enloquecí.

Celosos (y celados).

Me pregunto, ¿Quién sufrirá más? ¿El celoso, o el celado? A veces siento que ni yo misma entiendo mis celos estúpidos. ¿Por qué te celo tanto? Te juro que no soporto ver que le sonrías a otra, que le hables a otra, que te rías con otra.
Al celoso, solamente otro celoso puede entenderlo, puede entender lo horrible que se siente, porque te dan ganas de decir ¡BASTA! Aca estoy, YO ESTOY. Porque el celoso busca cualquier cosa para aplacar sus celos, los celos¿Son amor? ¿Son inseguridad? Para mi no son ni amor, ni inseguridad. Para mi, mis celos son impotencia, bronca. Saber que estoy perdiendo, que pierdo y que NADA puede calmar lo que siento. Por eso, difícil que me entienda alguien mientras ni yo pueda entenderme.
Para el celado debe ser más fácil, como una especie de 'halago', sentirse querido, necesitado (y no en el sentido de necesitado sexualmente, jajaj), deseado. Un egoísmo recíproco de parte de los dos. Porque los celos van más allá de los típicos "tapate", "sacate esa pollerita", "a ella no le hables"...  A veces los celos son inevitables, y a veces peligrosos.

Medias naranjas (y no la de los pies).

¿Existe la 'media naranja' tan famosa? ¿Existe esa persona ideal para nosotros? Es tan difícil encontrar a la persona indicada, que cuando la tenemos enfrente nuestro, por esa costumbre al 'no va a funcionar' la dejamos ir. ¿Y si era esa persona? ¿Y si realmente valía la pena equivocarse, sufrir, llorar, pero al final tener la recompensa? Parece que nos encanta encontrarle el pelo al huevo, la quinta pata al gato. Siempre hay algo que 'no va'. O no nos llamó, o no hizo lo que queríamos, o nos dijo un 'te amo' menos, en fin. Ya no creemos en la perfección (lógicamente ¡no existe!) o mejor dicho, ya no creemos en nuestra media mitad. (Muchos creemos que a nuestra media naranja la hicieron jugo, y mientras vamos comiendo mandarinas)
Esperamos, buscamos y encontramos. Y por esa obsesión de encontrar los defectos, nos olvidamos de disfrutar la 'perfecta imperfección' del otro. Si te quiero tanto, ¿para que te voy a cambiar? si se supone que me gustaste así. Pero no, SIEMPRE algo falla. Pero quizás en verdad no falla, sino que nosotros idealizamos al otro haciendo que falle.
Buscamos desesperados al amor, buscando alguien a quien amar, alguien a quién creer perfecto, pero a veces es tan simple encontrar a esa persona, que se nos hace imposible verla. Lloramos por el amor que se fue, por el que no fue, pero también a veces cometemos el error de pensar que un clavo saca a otro, siendo que eso nos sirve solamente para convencernos a nosotros mismos que el otro ya no importa. Por eso, te prefiero así, lleno de defectos, perfecto para mi, ¿por qué? ¡Porque no soy perfecta!

Dudas.

Horrible dudar. Horrible sentir que quiero, pero no puedo. O peor, puedo, pero ¿Quiero? ¿Realmente quiero? Todo el tiempo espero los momentos, pero cuando lo tengo, me acobardo, me encierro en mi coraza, y no sé que hacer. Quiero dar un paso, y retrocedo mil casilleros. Quiero dar marcha atrás cuando ya puse primera. No hay nada peor para mi que la indesición, mi indesición y mis dudas me matan. Me hacen no poder hacer lo que QUIERO, porque NO PUEDO. Porque sé que elegir trae problemas, y muchos. Y quizás por lo que más dudo, es porque no sé que viene después de mi decisión. ¿Voy a hacer lo correcto? ¿Era lo que quería? ¿Realmente lo necesitaba?
No, no y no. Miles de no me aturden, me zumban en la cabeza como moscas. Pero otros miles de SI también empujan por salir. Pero si dudo,  ¿será porque realmente no sé lo que quiero, o porque lo sé pero no quiero asumir lo que eso me traería?

Masoquistas.


Siempre es lo mismo, ¿no?. Sabemos que duele, sabemos que hace mal, pero es como si inevitablemente tengamos que terminar en lo mismo. Eso que me hace tan mal, es lo que, a la vez, no me puede faltar. Contradictorio, ¿no? Sí, lo suficiente. Pero mi vida es una contradicción. Te busco, te busco, te busco. Hasta que te encuentro. ¡TE ENCUENTRO! Pareciera que nos sentimos inevitablemente atraídos, por eso que nos hace tan mal, por eso que nos hace sentir peor que nada. Pero ¿Por qué? ni nosotros lo sabemos. Saber que es justamente ESO que nos hace mal, parece suficiente para hacer que vayamos hacia eso, como estúpidos, hipnotizados, dominados. Una parte de mi, necesita buscarte, tenerte. La otra, te odia, muchísimo; y lo único que necesita es que no existas. Y claro, la combinación entre esos dos puntos de vista, es explosiva. Terriblemente explosiva. Y de esa explosión, vienen las angustias, las ganas de llorar, el vacío terrible que siento cuando algo me recuerda a vos. Esa falta de vos. Esa asignatura pendiente, esa historia sin punto final, detenida en el tiempo, inconclusa.
Lamentablemente, en mi masoquismo consciente te necesito tanto...

Silencio.

Pensando que era lo mejor, me callé la boca., Porque como dice el refrán 'En boca cerrada, no entran moscas'. ¿Quién me habrá mandado a callarme? Soy una chica que habla mucho, muchisimo, demasiado. Pero cuando tengo que hablar, me callo. Y después me arrepiento, lógicamente. Me cuesta muchisimo demostrar mis sentimientos, y más si los tengo que decir. Creí que las cosas eran evidentes, pero no. Me dí cuenta que no. El silencio, ese silencio que ahora me está haciendo pagar mis errores. Y ahora ya no vale la pena hablar, que lo haga o no, no va a modificar NADA.
Porque, 'Reina del silencio, esclava de mis palabras', pero me di cuenta que mas que ser la reina de mi silencio, soy su esclava

Todo sigue ¿igual?

Mierda, que pasó el tiempo. Meses, muchos meses. Sin embargo, para mi es lo mismo. Es como que esto perdura en ese 'tiempo'. Sin embargo por otro punto, siento que con el tiempo cambia. Como si se hiciera más intenso, pero a la vez que se va de a poquito evaporando. Hacía mucho que no escuchaba esas canciones, me dan como una sensación tan rara, el momento se me hace presente una y otra vez. ¿Será que tengo una asignatura pendiente con vos? ¿Tengo que decir todo eso que tengo guardado? ¿Tengo que hacer todo eso que en su momento no hice? ¿Tengo que volver a empezar todo de vuelta, como esa vez que te dije 'SI, ME GUSTAS (MUCHO)' ? El tiempo pasa, pasa y pasa, no se detiene, pero siento que esto no se va, no avanza, quedó estancado aca, falta algo, falta una palabra, un momento, ALGO falta.

Errores.

Dicen que de los errores se aprende. Pero no es particularmente mi caso. Siempre girando en lo mismo, siempre en torno a la misma situación, el mismo error. Ese error que cometo una y otra vez, como casi por costumbre. Ese error, que me cuesta tanto no cometerlo. Siempre está esa palabra, mal dicha, ese gesto, o peor, ese silencio, eso que debería haberlo dicho. Y claro, después, me arrepiento. Después me pregunto '¿Qué hubiera pasado si hubiera actuado diferente?' Cuando actúo, no pienso. O porque lo pienso, lo hago. Y lo hago mal.
Tarde nos damos cuenta de lo que hicimos. Cuando cometo mis errores, me doy cuenta tarde, muy tarde. Cuando no hay solución, es como si se rompiera un cristal, por más que lo trates de arreglar, no vas a poder. Ese error, ese error que siempre cometo me trae muchas consecuencias, descepciones, más errores... Pero si algo aprendí de mis errores, es que de ellos no aprendí nada.

Tiempo de cambios.

El tiempo pasa. Rápido, muy rápido para mi. Cuando caigo en la realidad, el momento se me escapó, se fue. Y me encuentro con los cambios. Todo cambia. Desde los sentimientos, las personas, las actitudes. Todo está expuesto al cambio, y nada se salva de estos. Las personas cambian, a veces para bien, y muchas veces para mal. Aunque hay personas que 'no cambian más'... Cuando esa persona que te hacía tan bien, tan feliz, tan pleno, ahora te hace sentir lo peor, te lastima, te vacía, ahi te das cuenta del cambio. Ahí está el cambio. ¿Por qué cambian? Me pregunto, nos preguntamos. Si, a veces ni hay respuesta. Cambia, porque cambia. Y si, lógicamente, como todo está expuesto al cambio, yo también debo haber cambiado y seguiré cambiando, aunque no lo note. De las personas cambia la actitud, cambian los sentimientos, pero lo que nunca cambia ni va a cambiar es su escencia.
Lo malo de los cambios, es no saber lo que viene. Sabes que todo cambia, pero ¿Sabés como va a cambiar? eso es lo que nos asusta del cambio. Eso que ya dábamos por supuesto, apareció el cambio, y nos descolocó, ahora decimos, 'uh caagamos!' vos te esperabas una cosa, y viene la otra.
Tantas personas nos cambian, tantas cosas. Los amores, las descepciones, a simple vista nos cambian. ¿Pero hasta que punto todo cambia?


PD: ¡Nunca cambies!